Hace cerca de 15 años Lupe llegó a vivir al parque Mundo Aventura. Ella, Champaña, Violeta y Mariu, son tal vez las inquilinas más antiguas que tiene el parque. Son cuatro ejemplares de raza criolla que, a diferencia de sus semejantes, nacieron para ayudar a aliviar las dolencias que aquejan al a los seres humanos.
Estos cuatro ejemplares, desde su llegada al parque, se ganaron el aprecio de propios y extraños por su mansedumbre.
Son animales a los que la administración del parque destina muchos recursos tanto económicos como humanos para su bienestar. Lupe, por ejemplo, tiene 15 años de edad y fue amaestrada para la práctica de la equinoterapia. En este ejercicio de procurarle bienestar y tranquilidad a los seres humanos, la acompañan Champaña, Violeta y Mariu, en cuyos lomos han cargado a cientos de niños y adultos con discapacidad cognitiva.
No hace mucho tiempo y por primera vez en la historia de la localidad de Sumapaz, la administración puso en práctica la equinoterapia, para atender la condición de discapacidad cognitiva de un grupo de niños, con el fin de ayudar a sus procesos de rehabilitación.
Los beneficiaros fueron diez estudiantes de los colegios Jaime Garzón y Juan de la Cruz Varela quienes recibieron 16 sesiones de esta terapia, cada una de cuarenta y cinco minutos y se desarrollaron los días viernes.
Durante tres meses, Lupe, Champaña, Violeta y Mariu, soportaron con paciencia que los menores hicieran toda clase de prácticas sobre sus costillares. Hoy, a juicio de los padres y cuidadores, gracias a este proyecto los menores son mucho más solventes en su entorno social.
De acuerdo con la alcaldesa local, Francy Liliana Murcia Díaz, este método consiste en utilizar caballos para promover la rehabilitación de los niños a nivel neuromuscular, psicológico, cognitivo y social por medio del caballo, además, mejoran la interacción, la confianza y la seguridad de los niños tanto con los animales, como con el entorno en el que se desenvuelven.
En la equinoterapia se monta el caballo con el fin de realizar ejercicios específicos para rehabilitar o habilitar alguna función, tanto en niños como en adultos. Las condiciones que más hacen uso de este tratamiento son autismo, síndrome de Down y parálisis cerebral.
Según historiadores, desde la época de Hipócrates, el padre de la medicina, ya se recomendaba el uso de esta técnica para ayudar a personas con cuadros clínicos como insomnio y dolencias físicas.
La etapa de evaluación y desarrollo del proyecto se llevó a cabo en el Parque Mundo Aventura. Entre ellos está Santiago, quien cursa quinto de primaria en el colegio Jaime Garzón y a quien los médicos diagnosticaron discapacidad leve a sus siete años.